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A veces pensamos que es muy tarde, pero en realidad podemos cambiar nuestro estilo de vida con mucha voluntad y paciencia. Claro que no cambiaremos nuestros hábitos de la noche a la mañana, este es un largo camino, pero si realmente lo deseamos, lo lograremos.

No te desesperes, poco a poco. Tal vez, la primera semana puedes proponerte tomar menos soda. La segunda, podrías cambiar la soda por café, té y jugos naturales. La tercero, podrías comenzar a beber 4 vasos de agua diariamente. Terminando el mes, tomarás dos litros de agua diarios.

Recuerda que debemos estar mental y físicamente saludable. También puedes comenzar a reemplazar las horas frente a la televisión para los libros, para los juegos de estrategia o de mesa y visitar los lugares de tu ciudad o también viajar si tienes las posibilidades como modo de distracción más sana. Tendrás más cultura, un vocabulario extenso, mejores calificaciones, más conocimientos y oportunidades.

Si piensas que el deporte es muy difícil, puedes intentar otro tipo de ejercicio. Pero no se sabrás si algo es difícil si no lo intentas. Hay varios ejercicios diferentes y emocionantes como correr, andar en bicicleta, nadar, bailar, aeróbic, yoga y mucho más.

Ser saludable es un desafío, una desición y cada desición tiene un precio. Y el esfuerzo trae recompensas y nuestra mayor recompensa es la salud.